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Split (Spalato)


La segunda ciudad en importancia de Croacia, Split es, sencillamente, espectacular. Un punto de partida hacia las islas de la costa dálmata, si vas con tiempo para recorrer alguna; si no vas con tiempo, búscalo, la belleza de las islas premiarán el esfuerzo. 

Su centro histórico está atrapado entre los muros del Palacio Diocleciano, declarado Patrimonio de la Humanidad, una de las ruinas romanas más imponentes que he visitado.  El palacio fue construido para acoger al emperador Diocleciano, allá por el 295 d.C, cuando se retiró de la vida pública. Los materiales constructivos y el diseño fortificado, han favorecido que hoy en día podamos visitarlo, casi intacto.



Merece la pena perderse por las calles del recinto amurallado y sorprenderse con las tiendas y cafés que ocupan antiguas viviendas. Aunque la estructura original ha sufrido modificaciones desde la Edad Media, sigue conservando su encanto, el del mármol blanco envejecido por el tiempo. En las diferentes etapas de asentamiento de la ciudad, no se produjeron cambios estructurales importantes. En lugar de destruir las edificaciones del conjunto palatino, fueron adaptándolas a nuevos usos.



Se puede acceder por cualquiera de las cuatro entradas fortificadas que se conservan, cada una con nombre de metal. Si hay que elegir, yo entraría por la de Bronce, pegada al paseo marítimo. Esta entrada te lleva directamente a las tripas del palacio, que se conservan casi intactas, al permanecer durante siglos como escombreras de la ciudad.

Otra opción a tener en cuenta, es el acceso por la Puerta de Oro, en el extremo opuesto, donde se encuentra la famosa estatua de Gregorio de Nin, con el pulgar del pie desgastado, por la "tradición" de tocarlo para conseguir buena suerte.


Ver atardecer desde el paseo marítimo, uno de los más espectaculares que recuerdo, y adentrarse a cenar en alguna de las terrazas, no tiene precio,  o quizás si, porque los dueños de los restaurantes saben perfectamente que se encuentran en un lugar privilegiado. Aún así, todos acabamos cenando allí, al menos una noche.

De cualquier manera, Split bien merece una visita.



6 comentarios:

  1. Desde luego Split es una ciudad con mucho encanto. Recuerdo perfectamente lo bonito que era el paseo marítimo, super amplio, limpio y lleno de vida. Muy buena fue nuestra llegada en ferry, con todos los abueletes ofreciéndonos "zimmer". Qué recuerdos tan buenos!

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  2. que interesante¡¡¡ y que tal son los precios?

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  3. Mmm me tienes casi convencido, pero necesito saber más...!!! y una foto del paseo marítimo al atardecer.

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  4. Lo del alojamiento merece una postal íntegra.

    Respecto a los precios, Split en particular y Croacia en general, es bastante accesible. En sitios muy turísticos como Split, algunos restaurantes tienen precios prohibitivos, pero también son una minoría. De hoteles tendré que mirarlo, en mi viaje me alojé en casas particulares, una experiencia convivir con los croatas en sus hogares.

    La foto del paseo maritimo es mejor ir a allí para conseguirla. En algún momento hay que repetir destino, yo lo iría dejando caer.

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  5. buena eleccion,lo mejor de Croacia,sin duda.Si hay una ciudad que te pueda sorprender, esa es Split.Cómo una ruina romana se puede integrar a la perfeccion dentro de una ciudad contemporánea.Si alguien conoce algun sitio semejante, que me lo cuente!

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  6. La primera foto me ha dejado sencillamente alucinado. Parece que fuese un montaje, es espectacular el efecto del mar contra los muros. Lástima que no tenga algo más de resolución.

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